El ardor de la sangre
Título: El ardor de la sangre
Autor: Irène Némirovsky
Editorial: Salamandra
Año: 2007
Páginas: 158
Estado: prestado de mi padre quien ni siquiera sabe que alguien se lo regaló para su cumpleaños, porque no le gusta leer.
Se supone que Irène Némirovsky es una escritora rusa muerta en el holocausto y que escribió y llegó a ser un hit antes de que Hit dejara la media escoba por allá por el 35’-45´. Sus hijas encontraron sus manuscritos, y, no lo he averiguado aún, pero los guardaron por 60 años antes de publicarlos.
La Suite Francesa otro título de esta autora, me fue muy recomendada pero si se llegara a parecer un ápice a El ardor de la sangre quizá, sólo quizá, lo leeré, pero en ningún caso lo compraré.
Supongo que doña Irène no lo alcanzó a corregir; la idea central del libro, de que en la juventud aparentemente hay un ardor en la sangre una especie de calentura que hace actuar de determinada forma, que los viejos no entienden y han olvidado cuando pasaron por lo mismo, y que los jóvenes jamás entenderán a los viejos y así.
Un pueblo chico un infierno grande de la campiña francesa, un par de líos pasionales y en una mañana de trámites me terminé el libro.
Pero sí, entretenido, fácil de leer, letra grande y un par de elementos sabrosos de telenovela la hacen ideal para unas cuantas estaciones de metro.
Además que el titulo hace que toda la gente la mire a una con cara de ¿Será esa una novela pornográfica? Lo cual es muy gracioso, dan ganas de mirarlos de vuelta y decirles “Sí, estoy leyendo puras indecencias, y me gustan, aunque sea mentira”. Después de leer esto, o de leer el libro, si ven a alguien leyendolo en el metro, sabrán entonces que no es una novela pornográfica.
